Casi la mitad de los barracones escolares eliminados en España en el último lustro lo ha sido en centros valencianos
El pasado lunes 12.000 alumnos valencianos comenzaban el curso en barracones -de los cerca de 785.000 niños y jóvenes que empezaron las clases en Infantil, Primaria y Secundaria en la Comunitat Valenciana-. Esta cifra supone casi el 25% de los alumnos que han empezado sus clases en aulas prefabricadas en toda España (50.000), ya que la valenciana es la segunda autonomía con más barracones de toda España, sólo por detrás de Catalunya (20.000 estudiantes en este tipo de infraestructuras provisionales, con algunos centros que llevan dos décadas en esta situación), y por delante de Andalucía (11.000).
Sin embargo, desde 2015 -fecha en la que perdió el poder el PP y llegó el Botànic (PSPV y Compromís) a la Generalitat- hay 7.000 estudiantes valencianos menos estudiando en barracones -cuando el Botànic llegó al Consell eran 19.000 los niños y jóvenes instalados en módulos prefabricados-, mientras que en todo el Estado en los últimos seis años se han visto reducido en 15.000 (en el curso 2013-2014 había instaladas en toda España 64.000 módulos prefabricados). Así, casi la mitad de los barracones que se han eliminado a nivel estatal ha beneficiado a estudiantes valencianos (47%).
A comienzos del curso 2015-2016, había 26 centros íntegramente en aulas prefabricadas con más de 1.700 módulos instalados en toda la Comunitat Valenciana y un coste de 5,5 millones de euros en mantenimiento. Entre estos centros, se encontraban el colegio 103 de Valencia, que este año estrena colegio después de más de una década, o el Ciutat de Cremona de Alaquàs, uno de los que más se ha significado en la lucha por unas infraestructuras educativas dignas, cuyos alumnos siguen dando clase en las aulas prefabricadas (desde 2007) a la espera de que acaben las obras de la nueva escuela, que ha sufrido diferentes retrasos en los procesos de licitación y construcción. En una situación similar se encuentra el CEIP Regina Violant de Almassora, en construcción después de estar instalado en aulas prefabricadas desde 2006.
El pasado lunes, los estudiantes valencianos de Infantil, Primaria y Secundaria comenzaban el nuevo curso. De los cerca de 785.000 alumnos que iniciaron el curso, más de 2.000 estrenaron nuevas instalaciones -ya son trece las escuelas e institutos de nueva construcción desde 2015-, a los que hay que añadir otros siete centros que se encuentran en construcción.
Plan Edificant
En noviembre de 2017, el president Ximo Puig y el conseller de Educación Vicent Marzà presentaron Edificant, un plan de choque que preveía la construcción de 200 colegios e institutos, así como la reforma de otros 200. La iniciativa debe desarrollarse entre 2018 y 2022 con una inversión superior a los 700 millones de euros gracias a la colaboración entre la Generalitat y los ayuntamientos.
En pasado mes de diciembre, las poblaciones valencianas adheridas al Plan Edificant eran 154, con 279 actuaciones a realizar y una inversión prevista de 377,4 millones de euros. De estas intervenciones, 98 corresponden a la construcción de nuevos centros educativos.