El futuro que anhela Tellado
Hace unos días el portavoz del PPVOX en el Congreso (sí, digo “PPVOX”) pronunció unas frases atroces que a primera vista nos devuelven a los años 30 del pasado siglo, cuando las derechas de entonces preparaban el clima de violencia política y social que llevó a aquella España libre a la tragedia.
Escucho y leo reacciones airadas creyendo que ese señor habla en pasado ofendiendo a las víctimas del franquismo y a sus familias… pero esa pobre gente les importa una higa; creo que para los nietos de los verdugos, hoy de nuevo en franca sublevación contra el Régimen legítimo actual al que llaman, como Podemos, el “Régimen del 78”, los vencidos y su Memoria no existen y no pierden un minuto despreciándolos; están en otra fase.
Tellado no habla de pasado, sino de un futuro donde fusilan a un Gobierno que “nunca debió existir” metiendo “sus restos” en una nueva fosa que aún no está excavada. Para ello, en ese futuro necesitan otro golpe de Estado y más fosas en España; sibilino llamamiento a la violencia (“el que pueda hacer…”) que raya el delito y denota el odio que está llevando al PP a ser una simple excrecencia ideológica de VOX.
Y es que al igual que sus abuelos monárquicos intransigentes nunca asumieron ni toleraron aquella República, estos no toleran un Régimen constitucional que como entonces permite al Pueblo echarlos de un Gobierno que creen su propiedad privada.
Entonces reclamaban una libertad que creían perdida al tener que someterse a la Ley Democrática, la misma actitud que demuestran hoy, insumisos a la Constitución y como entonces, a Gobiernos progresistas que nunca reconocieron y menos aún quieren “obedecer”. Ese es el origen de las caceroladas contra el confinamiento en la pandemia y el enconamiento mediático, judicial y político que saben que acabará en la calle, donde ya empiezan con insultos graves contra el Presidente del Gobierno, ataques a sedes socialistas, cacerías humanas y apaleamientos a algún periodista.
La hostilidad y enfrentamiento en el campo de la Memoria Democrática son ya tradicionales; una larga batalla con múltiples episodios que evidencian que el fascismo sigue anidando en las entrañas de las derechas españolas, que retiraron los grandes retratos de Franco del balcón pero los conservan en la mesita de noche.
Ahí hay que situar la amenaza de Tellado, consciente de que su socio fascista y gran parte de sus correligionarios del PP se incorporarán con gusto a esta batalla concreta. Es el sueño profundo que en el fondo les sigue moviendo, un futuro donde acaban de nuevo con el diferente, con el disidente y otro Régimen democrático al que tampoco se quieren someter… primero, “su” libertad, es decir, hacer lo que les dé la gana en todos los órdenes, por encima de la Ley, sabiendo que siempre habrá plumas que desinformen, togas que los libren y confesionarios de guardia donde poner el contador de sus conciencias a cero.
Avisad@s estamos; hoy, la división, gazmoñería y equidistancia de l@s demócratas son un suicidio.
Matías Alonso Blasco – Pte. Del Grupo para la Recuperación de la Memoria Histórica de la Comunitat Valenciana
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