Ciudadanos Elche hace aguas con la suspensión de militancia de su portavoz
La Comisión de Régimen Disciplinario de Ciudadanos (Cs) ha abierto expediente disciplinario contra Eduardo García-Ontiveros, el portavoz de su grupo municipal en Elche, lo que en la práctica supone su suspensión de militancia.
El motivo, la decisión adoptada por Ontiveros de nombrar como asesora del grupo político a la periodista Irene Ripoll sin contar con el consentimiento del partido. Mientras el entorno del abogado asegura mostrarse tranquilo por “haber actuado en base las normas” de la agrupación, la otra regidora de la formación naranja, Eva María Crisol, con la que ha mantenido el enfrentamiento, recuerda que su decisión de nombrar a Ripoll asesora “fue unilateral”.
Recuerda Crisol que la secretaría de Acción Institucional se había decantado por el nombre propuesto por la portavoz adjunta, es decir, el de María Paz Gallud, en lugar del de Irene Ripoll. Pese a ello, Ontiveros optó hace un mes por nombrar como funcionaria de empleo a Ripoll, considerada de su confianza en un partido completamente dividido y en el que él lleva al frente solo seis meses.
Una división que viene desde hace años y que se terminó de evidenciar pocas semanas antes de las elecciones municipales cuando el que fuera el líder y portavoz, David Caballero, se salió del partido -constituyendo otra formación y acabando como concejal no adscrito- después de no lograr ser nombrado candidato a la alcaldía y ser denunciado por Crisol por unos supuestos pagos irregulares en concepto de publicidad.
El partido nombró en su lugar a un candidato desconocido para la ciudad, Eduardo García-Ontiveros, que en pocas semanas solo pudo certificar el momento de debilidad de una agrupación que ya era sinónimo de crisis. Cs perdió un concejal en las locales, quedándose con dos, Ontiveros y Crisol.
Ahora, el todavía portavoz del partido tendrá cinco días para recurrir ante el Comité de Garantías esta decisión que podría dejarle fuera del partido. Si se diera ese escenario, Ontiveros tendrá que decidir si continúa como concejal en el grupo de los no adscritos o devuelve su acta, en cuyo caso entraría como edil precisamente Irene Ripoll.