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La expresidenta del PP vasco Amaya Fernández deja la primera línea y ficha como asesora del Tribunal de Cuentas

Amaya Fernández, en su etapa como dirigente del PP vasco

Iker Rioja Andueza

10 de enero de 2022 17:22 h

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La exsecretaria general y expresidenta interina del PP vasco, Amaya Fernández, ha pasado a ocupar un cargo de asesora en el Tribunal Vasco de Cuentas Públicas (TVCP) dentro del equipo de María Teresa Crespo, la vocal propuesta por esta formación política en virtud del pacto alcanzado con PNV y PSE-EE para el reparto de seis de las siete vocalías del órgano fiscalizador y para la reforma parcial de su normativa. Después de haber sido relegada completamente de la primera línea por el nuevo equipo de Carlos Iturgaiz tras una operación de Génova, Fernández continuaba como portavoz en las Juntas Generales de Bizkaia, aunque la caída de apoyos de los 'populares' en 2019 llevó a los dos únicos electos al grupo mixto.

El nombramiento de Fernández, que no ha trascendido hasta ahora, fue efectivo el 21 de diciembre de 2021, el mismo día en que los nuevos miembros del Tribunal de Cuentas tomaron posesión en el Parlamento Vasco. Así consta en un documento oficial de esta institución firmado por Julio Artetxe, secretario general. De hecho, las fuentes consultadas explican que hace semanas que la exdirigente del PP vasco renunció a su escaño en Bizkaia y que trabaja ya en Vitoria, donde tiene su sede el tribunal. Es más, no participó ya en el pleno de final de año en que se aprobaron los presupuestos de 2022: su colega Eduardo Andrade ejerció de portavoz del PP.

Fernández era la 'número dos' de Alfonso Alonso. Cuando el equipo de Pablo Casado maniobró para apartar al exministro de la candidatura a las autonómicas de 2020 en favor de Iturgaiz, se creó una bicefalia 'de facto' con Fernández como presidenta interina e Iturgaiz como cara visible en lo político. En puertas de la campaña electoral -los comicios fueron finalmente en julio por la pandemia-, Génova empezó ya los movimientos para dar todo el poder orgánico a Iturgaiz -que ya fue presidente décadas atrás- y apartar definitivamente al equipo de Alonso. En esa campaña, en la que el PP concurrió en coalición con Ciudadanos, la presidenta tuvo un papel muy limitado en comparación con otros modelos bicéfalos como el del PNV, con Andoni Ortuzar compartiendo espacio con Iñigo Urkullu. Pese a la debacle electoral de Iturgaiz, ese otoño Casado le dio sin un congreso todo el poder interno y puso fin a la etapa de Fernández, que se guareció en su escaño en el Parlamento foral vizcaíno.

La salida se produce de mutuo acuerdo entre las partes y con la perspectiva de que el PP pueda promocionar ya un nuevo liderazgo en Bizkaia para las elecciones forales de 2023. La siguiente en la lista electoral de 2019 y que estaría llamada a ocupar el escaño de Fernández es Esther Martínez, exparlamentaria y exportavoz también en Bizkaia. Después de haber sido candidata en 2011, fue apartada como portavoz en 2014 y el entonces responsable de la formación, Javier Ruiz, alegó que se hacía para acabar con “personalismos exagerados” y para restablecer la “democracia interna”.

La salida de Fernández sigue a otras que se han ido dando en la primerísima línea del PP vasco como consecuencia de los cambios ocurridos en los últimos años desde la llegada de Casado a la dirección nacional. Borja Sémper, representante del ala más moderada y portavoz parlamentario, dejó la política en enero de 2020. Semanas después fue la gran crisis interna que acabó con la etapa de Alonso. Ambos se habían significado por haber apoyado a Soraya Sáenz de Santamaría en el congreso que eligió a Casado. Más recientemente la que comunicó su renuncia a la candidatura fue la portavoz en Vitoria, Leticia Comerón, de sólo 39 años.

En cuanto al Tribunal de Cuentas, su renovación para los próximos seis años llegó en medio de la polémica. Finalmente, la reforma legislativa no prohibió el salto de cargos públicos directamente desde la política al órgano fiscalizador tras la controversia por la recolocación en 2015 del dirigente del PNV José Luis Bilbao, que en cuestión de días saltó de presidir la Diputación de Bizkaia a hacer lo propio en el órgano auditor económico. PNV, PSE-EE y la coalición de PP y Ciudadanos pactaron una reforma de algunos aspectos internos y acordaron también el reparto de asientos en el tribunal, con tres para los nacionalistas, dos para los socialistas y uno para PP+Cs a pesar de ser la cuarta fuerza política en el Parlamento Vasco. La nueva presidenta es Ana Helguera, exedil del PNV, y esa formación propuso también a Jaime Domínguez-Macaya, concejal en Donostia, y a Josu Zubiaga, 'número dos' en el Departamento de Seguridad. Los socialistas son Inmaculada Anda y José Ángel Quintanilla Los 'populares' promocionaron a María Teresa Crespo, que ya ocupó ese mismo puesto en la etapa anterior. El séptimo lo ocupa una persona propuesta por EH Bildu, Xabier Txokarro.

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