El Gobierno valenciano sancionará con hasta 600.000 euros las irregularidades en apartamentos turísticos
La Generalitat Valenciana aprueba este viernes, en el último pleno antes de las vacaciones, el decreto que regulará los usos de las viviendas turísticas. El Gobierno de Carlos Mazón busca poner orden ante el aluvión de pisos de alquiler vacacional, cuya oferta se ha disparado en los últimos años, y acusa al anterior Ejecutivo de izquierdas de “irresponsabilidad” en este campo.
El presidente de la Generalitat y la consellera de Turismo, Nuria Montes, han presentado este jueves el texto legal, que deberá ser ratificado por las Corts Valencianes a partir de septiembre. La norma deja en manos de los ayuntamientos las labores de inspección, control y sanción de las viviendas turísticas y prevé multas de hasta 600.000 euros en las irregularidades. Los ayuntamientos también podrán decidir si quieren limitar las licencias para los nuevos apartamentos.
El decreto obliga a los propietarios de los pisos de uso turístico a comunicar antes del 31 de diciembre de este año la referencia catastral de la vivienda si no quieren ser dadas de baja del registro oficial y reiniciar los trámites. Para las nuevas viviendas se incluirá en la declaración responsable un certificado que indique que la comunidad de propietarios no prohíbe el establecimiento de viviendas turísticas.
También contemplará la renovación de las declaraciones responsables cada cinco años y establecerá la titularidad personal de las licencias, para que si el inmueble se vende se deba volver a solicitar y evitar la especulación. La norma prohíbe los cajetines en el portal y obliga a que se dé un servicio de recepción; es decir, que vaya alguien a entregar las llaves y se inscriban las personas que vayan a pernoctar.
Pese a la nueva regulación, el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, ha querido apuntar que los pisos turísticos no son un problema. Mazón ha considerado “injusto que se achaquen a los pisos turísticos todos los males” cuando suponen el 1,8 % del parque inmobiliario e insiste en que la vivienda vacía es el 14 %. El líder popular califica de “xenófobos y clasistas” los movimientos de “turismofobia”. En el mes de julio, la Comunitat Valenciana contaba con 105.111 viviendas de uso turístico registradas, frente a las 38.319 del año 2015. Se estima que las irregulares puedan ser el doble.
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