Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

La izquierda valenciana cree que el Pacto del Botánico es el dique de contención de la extrema derecha

Antonio Estañ junto a Ximo Puig y Mónica Oltra

Laura Martínez

Los resultados de las elecciones andaluzas no han dejado dormir a más de un líder político. En el ámbito valenciano, muchos reconocen estar preocupados por el auge de la extrema derecha. Una tendencia que se ha visto venir en Europa y que en España, con la convocatoria de Andalucía, irrumpe por primera vez de forma explícita en un parlamento.

Entre los múltiples análisis que discurren a lo largo de este lunes, representantes de las tres formaciones de izquierda que gobiernan en coalición en la Comunitat Valenciana consideran que su pacto es una especie de dique de contención contra los ultras y las políticas sociales una vacuna contra el fascismo que se quita la careta en el Estado español.

El president de la Generalitat y líder de los socialistas valencianos, Ximo Puig, cree que el auge de la extrema derecha es “la peor de las consecuencias” y que su partido debe reflexionar. “Es evidente que algunas cosas habremos hecho mal y los otros partidos para que emerja con esta fuerza la extrema derecha, y la primera consecuencia que tiene que haber es frenarla, porque significa que la democracia no es irreversible”, ha manifestado a la entrada de un coloquio, citando a la filósofa Adela Cortina. Preguntado por si Susana Díaz debe dimitir como cabeza de los socialistas andaluces tras perder 14 diputaods, ha preferido no hacer análisis “de una manera precipitada”.

“La experiencia del gobierno del Botànic ha sido una experiencia favorable al interés general de los valencianos, y creo que nosotros lo que tenemos que hacer es consolidar aún el final de la legislatura, es muy importante porque hay muchas cosas importantes que vamos a realizar, con unos presupuestos que espero que den respuesta a todo lo que son los problemas reales de los ciudadanos y que no tienen nada que ver con esas miradas xenófobas, racistas, que lo único que quieren es intentar utilizar el miedo para sacar votos”, explicaba Puig.

En la misma línea se manifestaba el síndic de Compromís, Fran Ferri, considerando que “en nuestra tierra trabajamos para luchar contra el fascismo haciendo políticas para la mayoría” entre las que ha citado Xarxa Llibres, el aumento de becas o la reducción de tasas universitarias, o la ampliación de derechos “colectivos e individuales” como suponen las leyes aprobadas la última legislatura. “Si continuamos haciendo lo que pactamos con la ciudadanía en 2015 podremos cerrar el paso a la extrema derecha”, ha añadido.

Para el portavoz de Podemos, Antonio Estañ, “la principal lección es que si no seguimos avanzando podemos generar el caldo de cultivo de la extrema derecha, trasladando la agenda política a la confrontación con Cataluña y los inmigrantes”, los principales pilares del discurso de Vox más mediatizado. El síndic cree que “los resultados de Andalucía no son extrapolables al contexto valenciano. Aquí ha habido cooperación entre fuerzas progresistas que ha conseguido establecer una agenda social para la mayoría”.

El secretario general considera que el adelanto electoral también ha pasado factura: “El tacticismo electoral se penaliza. Una apuesta en clave de partido y no en clave de proyecto corre el riesgo de ser penalizada y espero que aquí se tome nota”, ha advertido el secretario general. Para la formación morada el proyecto municipalista es fundamental para evitar una radicalización de la política estatal.

Etiquetas
stats