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La “metamorfosis urbana de València”: cuenta atrás para el adiós al muro ferroviario que divide los barrios del sur

Proyección del corredor verde sobre las vías que separan Jesús y Quatre Carreres, en València.

Laura Martínez

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La ciudad de València vivirá esta década una de sus mayores transformaciones desde el desvío del cauce del Túria con el llamado Plan Sur en los años setenta. El soterramiento de las vías que dividen los distritos de Quatre Carreres y Jesús, el canal ferroviario que parte en dos la ciudad, comenzará a materializarse en los próximos meses, con la vista puesta en ser un recuerdo en 2027.

La “metamorfosis urbana de Valencia”, como lo ha definido la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, dará en pocos meses sus primeros pasos. Este jueves la ministra firmaba el convenio para el canal de acceso con el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y el alcalde de València, Joan Ribó, un trámite administrativo que dará pie a que Adif saque a licitación las obras para enterrar las vías. La inversión superará los 550 millones de euros, espera contar con el apoyo de 150 millones de euros de los fondos europeos Next Generation y estará financiada por las tres administraciones públicas. Desde que se firmara el acuerdo entre administraciones el pasado año, casi veinte después del primer convenio para el Parque Central, la previsión presupuestaria de las obras se ha encarecido un 25% como consecuencia del aumento de la inflación.

El convenio permite ocho actuaciones en la ciudad, entre las que destacan el soterramiento de todas las vías de acceso a la Estación del Norte de València y a Joaquín Sorolla, prolongando los túneles del nudo sur, y la remodelación de la estación que recibe los trenes de larga distancia. También permitirá avanzar en el Corredor Mediterráneo con la adaptación de la vía al ancho europeo, eliminar el puente de Giorgieta conocido como el “scalextric” y facilitar la proyección del Parque Central. A medida que avance la actuación, irá cayendo el muro de raíles que divide los barrios del sur de la ciudad y se irá completando el bulevar García Lorca, un corredor verde de 49.000 metros cuadrados que conectará ambos distritos.

La obra supone cerrar una herida histórica en la ciudad, que se originó con las primeras instalaciones ferroviarias hace 170 años. “El abismo urbano empieza a desaparecer”, ha resaltado el president de la Generalitat, Ximo Puig, que considera que la proyección acerca a Valencia a “la Europa de los corredores”. El alcalde de València, Joan Ribó, ha reclamado a la ministra “celeridad en la tramitación de proyectos como el túnel pasante, la Estación Central y la doble plataforma a Castellón” en un “tono reivindicativo que tenemos la obligación de mostrar”. “La ciudad de València no se puede permitir perder ningún otro tren, ya ha perdido demasiados en su historia reciente”, ha señalado el alcalde, visiblemente contento con el proyecto. Por su parte, la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, ha destacado la “apuesta inequívoca” por el impulso al corredor y ha recalcado que los Presupuestos Generales del Estado vigentes consignan más de 1.720 millones de euros, de los que uno de cada cuatro se está invirtiendo en la Comunidad Valenciana, y que se van a dedicar más de 1.556 millones de euros de los fondos europeos de Recuperación a acelerar esta inversión.

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