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Una nueva avería en el AVE a Castellón deja tirado otra vez al Gobierno: a Rajoy en su viaje inaugural y a la ministra Delgado este viernes

Pasajeros en un AVE.

Miguel Giménez

Valencia —

La ministra de Justicia en funciones, Dolores Delgado, ha participado este viernes en Castellón en un acto de homenaje a los represaliados del franquismo. Sin embargo, no ha podido llegar a la hora prevista a la capital de la comarca de La Plana por un problema en la línea férrea que une la capital castellonense con Valencia. Una avería en las instalaciones de seguridad y comunicaciones de Adif (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias) ha provocado retrasos de más de una hora en el Corredor Mediterráneo. 

Concretamente, entre las 12 y las 13.30 horas aproximadamente, una incidencia a la altura de la localidad de Moncofa (Castellón) ha provocado una falta de tensión en la vía que ha afectado a seis trenes, tres de cercanías y otros tres de larga distancia (el convoy del AVE, un Talgo y un Euromed), que han acumulado retrasos de entre una hora y hora y media.

Desde su inauguración, hace menos de dos años, la alta velocidad entre Valencia y Castellón ha registrado diversos problemas. Sin ir más lejos, apenas unos meses después de su estreno las obras del tercer carril obligaron a los pasajeros del AVE a realizar parte de su recorrido en autobús. Y a eso se suman las numerosas críticas que recibe el servicio de Cercanías de la línea C-6, que une Valencia con Castellón, por los retrasos y suspensiones que sufre -los cercanías de Renfe han perdido 11 millones de usuarios en la Comunidad Valenciana en una década por el mal servicio, los retrasos y las cancelaciones-.

Rocambolesco viaje inaugural

El Gobierno del Partido Popular vendió en enero de 2018 el estreno del AVE entre Madrid y Castellón como un logro. El entonces presidente, Mariano Rajoy, no dudó en protagonizar ese estreno junto al que era ministro de Fomento, Íñigo de la Serna. Sin embargo, aquel viaje inaugural se convirtió en un fracaso monumental. El convoy, que debía realizar el trayecto entre las dos ciudades valencianas en 55 minutos, tardó una hora y cuarto después de permanecer parado durante 22 minutos a la altura de Sagunto. El problema fue entonces un fallo en el sistema de cambio de vía.

Apenas unos días después de ese primer viaje, una nueva avería impidió la circulación del tren de alta velocidad, por lo que los 47 viajeros que viajaban a bordo tuvieron que tomar un tren de Cercanías hasta Valencia y desde allí tomar otro AVE hasta Madrid, destino original del convoy.

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