Los huertos urbanos de Benimaclet no legalizados solo podrán seguir regando con aguas residuales

Unas 300 personas participaron el pasado sábado en una protesta convocada en la plaza del Ayuntamiento por diferentes colectivos del barrio de Benimaclet para exigir al Ayuntamiento que se mantenga el suministro de agua en todos los huertos urbanos.

La concentración, convocada por la Asociación de Vecinos y Vecinas de Benimaclet, Huertos Urbanos de Benimaclet, CSOA l'Horta, Cuidem Benimaclet y Entre Barris, rechaza el corte del brazo de Alegret de la acequia de Mestalla y exige al Ayuntamiento de València “una solución que no atente contra el patrimonio cultural, el tejido social del vecindario, la sostenibilidad, la resiliencia ni la capacidad de autoconsumo”.

La polémica provocó además un choque entre Compromís, que se posicionó del lado de los colectivos al exigir que se garantice el suministro de agua, mientras desde el PSPV que gestiona la Concejalía del Ciclo Integral del Agua recordaron que el corte se produce tras una denuncia del Seprona, tras detectar vertidos ilegales en la aledaña acequia de Rascanya.

Desde la la delegación que dirige la socialista Elisa Valía insistieron este martes en explicar que tras el expediente abierto por la Guardia Civil, el Ciclo Integral tomó muestras de agua en la acequia de Mestalla y que se detectaron también aguas residuales en el brazo del Alegret, uno de los cuatro de la acequia, por lo que, de acuerdo con los regantes, se decidió redactar un proyecto para llevar el agua de los dos ramales contiguos, de buena calidad, a los huertos gestionados por agricultores profesionales a los que da servicio el del Alegret. Esa misma conducción permitiría también dar servicio a la parcela que gestiona la asociación de vecinos, cedida en su día en precario por el propio Ayuntamiento y por un propietario particular.

La Concejalía desmintió que se vaya a producir un atentado patrimonial porque en ningún momento va a tocar el brazo del Alegret y comentó que tan solo hay unos terrenos de cultivo de autogestión “ocupados” que carecen de derechos en relación al suministro de agua al no estar dados de alta como regantes que podrán seguir usando el agua que baje por el ramal, aunque advirtieron de que se trata de aguas residuales.

Por su parte, fuentes de los regantes de Mestalla han explicado que una vez esté el proyecto de canalización realizado para suministrar el agua a los regantes, por recomendación del Ayuntamiento no se dará paso de agua del río por este brazo para evitar que se mezcle con las aguas residuales, por lo que únicamente circularán aguas negras para su vertido al colector norte.

Es decir, una vez ejecutada la mencionada obra por el brazo del Alegret que suministra a los huertos “ocupados” tan solo bajarán aguas residuales, salvo que regularicen su situación.

Según la asociación de Huertos Urbanos de Benimaclet, el corte del brazo de Alegret comportaría destruir “la iniciativa social y ciudadana de los huertos urbanos de Benimaclet, en funcionamiento desde hace nueve años y que son un modelo de autogestión, sostenibilidad y recuperación del territorio”.