La extrema derecha de Vox esgrime propuestas antiabortistas, antiLGTB y antifeministas en el Parlamento valenciano

El partido de extrema derecha Vox ya ha superado el medio año en las instituciones valencianas. Desde que lograra una decena de representantes en el Parlamento valenciano en las elecciones autonómicas de abril de 2019, la formación que lidera Santiago Abascal ha comenzado a aplicar su discurso sobre determinados colectivos. La extrema derecha carga contra los menores tutelados por la Administración pública, contra las personas que imparten cursos para prevenir la violencia machista en los colegios o charlas LGTBI y contra las personas que ocupan viviendas de forma irregular. Lo hace en sus discursos y también en sus iniciativas parlamentarias.

Vox practica la guerra del penúltimo contra el último; busca el enfrentamiento de las personas con colectivos vulnerables. Así, contrapone en sus discursos los recursos destinados para combatir la violencia machista a los destinados a centros de menores, por citar un ejemplo de su última intervención parlamentaria en el debate de presupuestos.

La última semana antes de las vacaciones parlamentarias, los portavoces de la formación de extrema derecha registraron una serie de peticiones que aún no ha recogido el Boletín Oficial de las Corts Valencianes pero sí constan en la web, entre ellas, un buen número de medidas para fomentar la maternidad. Estas iniciativas instan al Ejecutivo autonómico a crear una baja maternal escolar para las adolescentes embarazadas o un cheque para que dispongan de bienes básicos para el cuidado de un bebé. La proposición no de ley considera que las jóvenes “pueden sentirse estigmatizadas por haber decidido seguir adelante en su embarazo”. En este paquete de medidas, la formación de extrema derecha pide que se realicen campañas para sensibilizar sobre los riesgos del aborto.

El Boletín Oficial del parlamento autonómico recoge preguntas de Vox sobre un taller de violencia de género que replantea los cuentos infantiles desde una perspectiva igualitaria impartido en un centro educativo de Castellón. Vox ya ha frustrado varias declaraciones institucionales contra la violencia machista y se ha apartado orgullosamente en las concentraciones cuando una mujer ha sido asesinada por su pareja o expareja. El 25N, día contra la violencia machista, la formación pidió la derogación de la Ley de Igualdad de 2004. La formación de extrema derecha ya solicitó los datos de las personas que ofrecen talleres de formación y no discriminación a las personas LGTBI en los colegios, una petición que la Mesa del Parlamento bloqueó por discriminatoria. Con la petición de datos de menores tutelados sucedió lo mismo, incluso se planteó si podría constituir un delito de odio, al asociar la petición a unos supuestos niveles de delincuencia en los centros de menores.

El grupo parlamentario también ha dirigido algunas medidas hacia las instituciones que promueven el valenciano, con el conseller Vicent Marzà entre sus blancos favoritos. Así, propuso la creación de una comisión de investigación a Acció Cultural del País Valencià, preguntas sobre el presupuesto de la Oficina de Drets Lingüístics o la petición pública de ilegalizar a partidos nacionalistas, apuntando a Compromís durante la campaña electoral de las generales.

La extrema derecha también ha presentado una iniciativa de Derogación de la Ley de Memoria Histórica y ha solicitado documentación sobre el periodo de la República en Valencia y sus militantes. En concreto, “toda la información relativa a los registros existentes de vecinos de la provincia de Alicante [también de Valencia y Castellón en otras propuestas] que se alistaron y formaron parte de la 9”. “La Nueve” es la compañía de exiliados españoles que participaron en la liberación de París en 1944. Esta iniciativa fue retirada sin que conste la fecha.

En paralelo, el grupo de extrema derecha ha creado un canal en Youtube en el que cuelga algunas intervenciones de sus diputados. Los trabajadores del grupo parlamentario suelen ir cámara en mano para dejar constancia de ciertos discursos, tanto en los plenos como en las comisiones. En ocasiones, son los propios diputados quienes graban a sus compañeros. Intervenciones que a menudo llevan ya redactadas a las comisiones y se limitan a leer.

En estos vídeos se puede ver, según ellos, cómo “José María Llanos (VOX) da una lección de historia al PSOE y destroza la Ley de Memoria Democrática”, una intervención en la que acusa a los partidos de “regular la memoria” que “es de las personas y nadie puede condicionar”; o cómo “Ana Vega (VOX) destroza los presupuestos absurdos del Botánico que no ayudan a nadie”, unos presupuestos a los que Vox no presentó ninguna enmienda parcial. En la intervención, la portavoz de la formación critica que se destinen recursos para investigar la violencia de género o contrapone los recursos de programas de igualdad LGTBI con los destinados a niños con necesidades especiales. Cero enmiendas parciales.