La Generalitat solo activó la emergencia en la presa de Buseo, única de su competencia, al día siguiente de la dana ya con siete fallecidos aguas abajo

La presa de Buseo, la única de titularidad de la Generalitat Valenciana y dependiente de la Conselleria de Agricultura que dirige Miguel Barrachina, fue uno de los puntos críticos, junto a la de Forata y al barranco del Poyo, el 29 de octubre del pasado año, día en que la trágica dana dejó 229 fallecidos.

Sin embargo, a diferencia de lo que sucedió en el embalse de Forata, controlado por la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) que informó a Emergencias de la Generalitat de los diferentes escenarios que se iban dando con horas antelación a que la presa empezara a verter por los aliviaderos, de Buseo no hubo prácticamente ninguna información.

Así lo acredita la documentación presentada por el presidente del Gobierno valenciano en funciones, Carlos Mazón, el pasado martes 11 de noviembre con motivo de su comparecencia en la comisión de investigación de las Corts, tal y como avanza el diario Levante-EMV. El documento 'Argumentos sobre la existencia de avisos previos', al que ha tenido acceso elDiario.es, recoge, entre otras cosas, las diferentes alertas hidrológicas activadas el 29 de octubre. En concreto, el Centro de Coordinación de Emergencias (CCE) de la Generalitat activó una alerta a las 11.45 horas por el aumento del caudal del río Magro y a las 12.20 horas por el barranco del Poyo.

En cuanto a la presa de Forata, la CHJ advirtió a Emergencias, ya con el Centro de Coordinación Operativa Integrado (Cecopi) reunido, de la activación de la declaración del escenario 0 a las 17.26 horas, del escenario 1 a las 17.52 horas y del escenario 2, que implica “peligro de rotura o avería grave”, a las 18.05 horas. Además, a las 16.55 horas, la CHJ manda el siguiente correo al CCE: “Se comunica que en la próxima hora se prevén caudales superiores a 1000 m3/s en el río Magro por el alivio de la presa. Las siguientes poblaciones se pueden ver significativamente afectadas por el río Magro: Montroi, Real, Alfarp, L'Alcudia y Algemesí. Estos caudales se incorporan al río Júcar en Algemesí. Se seguirá con la vigilancia del embalse y se comunicará cualquier cambio significativo”. A las 17.56 horas la CHJ nuevamente informa a Emergencias de la Generalitat de que “el embalse de Forata ha empezado a verter y se prevén caudales superiores a 1000 m3/s en el río Magro”.

En el documento de Mazón, sin embargo, no aparece comunicación alguna referente a la presa de Buseo, la única de su competencia directa. Sin embargo, según la documentación recabada por elDiario.es, empezó a verter por aliviadero en torno a las 21.45 horas y por coronación a entre las 21.50 y las 22.10 horas. Con todo, no fue hasta el día siguiente, 30 de octubre a las 9.15 horas, cuando el Gobierno valenciano activó directamente la emergencia por situación 2.

Y eso que entre las 9.30 horas de la mañana del 29 de octubre y las 23.01 horas de la noche la CHJ mandó una decena de avisos por superación de umbrales de lluvia en el punto de control de Chera. La noche de la dana fallecieron siete personas en poblaciones aguas abajo de la presa de buseo como consecuencia de su desbordamiento: dos en Sot de Chera y cinco en Pedralba.

La jueza de Catarroja que investiga la gestión de la catástrofe ha solicitado diferentes informes para comprobar el funcionamiento de la instalación durante la riada, el personal que allí se encontraba y las comunicaciones que se produjeron. En uno de sus autos pone de relieve que el ingeniero hidráulico A. C. C., del Grupo TYPSA que gestiona y explota la presa, traslada su preocupación a Emergencias de la Generalitat la noche del 29 de octubre. Así, a las 23.02 horas manda un correo electrónico en el que afirma que “es probable que la presa esté vertiendo por coronación y el caudal aguas debajo de la presa hacia Sot de Chera sea elevado”. Dicha información fue conocida en el CCE, ya que consta anotado, a las 23:04 horas que “se recibe comunicación responsable explotación de la presa de Buseo, indicando la presa posiblemente está vertiendo”.

La acusación solicitaba la comparecencia del conseller de Agricultura, Miguel Barrachina, en calidad de testigo, pero la jueza lo deniega “por el momento”. Según el auto judicial, “en la determinación de la mecánica de lo sucedido y el posible control de las circunstancias y avisos ante un desbordamiento, la declaración del Conseller de Agricultura, Agua, Ganadería y Pesca, Miguel Barrachina Ros, no es necesaria en el presente momento, si atendemos igualmente que no consta que estuviera presente en el Cecopi, de forma presencial o telemática”. Por otra parte, destaca que ya se ha acordado “la testifical del señor A. C. C., ingeniero hidráulico del grupo TYPSA y del señor P. J. R. S., director de explotación de la presa de Buseo”.

Al respecto, fuentes de la Conselleria de Agricultura aseguran que “aunque la presa es de su titularidad la gestión de la explotación de la presa está externalizada”. Así, “desde el año 2022 esa función está encomendada a la empresa, Typsa, por medio de un contrato de gestión y explotación adjudicado en 2022 por el Gobierno del Botánico”. Por tanto, “la administración autonómica no tiene facultades directas ni en la explotación ni en la gestión de emergencias en Buseo”, defienden.

Las mismas fuentes aseguran que el Plan de Explotación de la Presa otorga un papel protagonista a la CHJ en casos “de avenidas u otras circunstancias de tipo excepcional” a través del Comité Permanente, pero el organismo estatal afirma que el documento que prevalece en estos casos es el Plan de Emergencia de Presa según el cual el responsable de declarar las diferentes situaciones de emergencia y de reportar la información a los diferentes organismos (CHJ, Generalitat y Delegación del Gobierno) es el director de explotación de la presa. Así consta en un informe remitido por la CHJ a la jueza. En este punto, se establece que “el sistema de comunicaciones propuesto en el presente Plan de Emergencia centraliza las comunicaciones en una sala de control que deberá disponerse para tal fin en la oficina de explotación de la Generalitat Valenciana (ver cuadro)”.