La dimisión forzosa de un alcalde pedáneo “independentista” de Elche reabre la división entre el PSOE y Compromís

La dimisión del alcalde pedáneo de El Altet vuelve a enfrentar a PSPV-PSOE y Compromís, las dos fuerzas que, junto con el Partido de Elche, forman parte del equipo de gobierno local. En este caso, la coalición de izquierdas no comparte “en absoluto” la presión ejercida por el alcalde, el socialista Carlos González, contra el pedáneo Ángel Jesús Soler Tristán, quien ha asegurado que se ha visto “obligado” a renunciar a su cargo público.

Soler es alcalde de este enclave costero desde 2015 cuando, fruto de un novedoso proceso participativo, los vecinos lo eligieron con el respaldo del 44% de los votos frente a otros tres aspirantes. Elche dejaba atrás la tradicional elección “a dedo” de sus pedáneos que venía ejerciendo el alcalde o alcaldesa de turno+. Sin embargo, el municipio no contaba con que, poco tiempo después, resurgiría en El Altet un sentimiento independentista –que ellos llaman segregacionista- con el objetivo de separarse de la localidad ilicitana y constituirse como municipio nuevo.

El pedáneo Soler ha venido siendo uno de los promotores de este movimiento, primero vecinal y ahora con expectativa de presentarse a las elecciones locales de 2019. Cuenta que su forma de entender “la autonomía de gestión en los asuntos locales de competencia municipal” le ha llevado a “chocar” con el equipo de gobierno, al que ha acusado en numerosas ocasiones de “dejadez” y de olvidarse de los vecinos de El Altet.

El alcalde, el socialista Carlos González, sin reconocer dichas presiones, sí que apunta a la “incompatibilidad manifiesta” que existe entre “representar al Ayuntamiento en una pedanía y promover al mismo tiempo su segregación del término municipal”. González también señala que así se lo ha venido advirtiendo a Soler en “diversas conversaciones” y que al final debe prevalecer “la unidad territorial”.

Por su parte, Compromís, a través de su concejal de Participación Ciudadana, Felip Sánchez, se muestran tajantes contra su socio de gobierno. “El alcalde no ha entendido que los representantes pedáneos tienen derecho a tener y a manifestar su propia opinión personal sobre los temas que quieran y sobre todo si afectan al municipio por muy diversas y alejadas que estén de su Ayuntamiento”, ha declarado.

Sánchez, que fue el promotor de la elección democrática de los 27 alcaldes pedáneos de Elche, ha añadido que “la diversidad y la pluralidad enriquece nuestro municipio y las actitudes o medidas censoras como a la que estamos asistiendo no ofrecen una buena salud democrática” para la localidad.

El primer edil les ha respondido que “la consulta” que se llevó a cabo para el nombramiento de los pedáneos permitió “conocer las preferencias de los vecinos pero no legitima para actuar en contra del interés general del municipio”.

El regidor socialista es el que tiene la última palabra y deberá decidir si acepta o no la dimisión de Soler. En principio, le sucederá en el cargo el siguiente candidato que más votos cosechó, José Manuel Meseguer, del PSOE, y enfrentado a Soler desde la campaña electoral. Los socialistas esperan que una vez fuera el pedáneo independista, se relaje la tensión en una zona estratégica para Elche como es El Altet –donde está el aeropuerto-. Sin embargo, todo parece indicar que la salida de Soler alentará a sus vecinos.

“El Altet, ahora más que nunca, va a tener en mí a un firme defensor de la identidad propia de nuestro pueblo, luchando, como hasta ahora por conseguir mejorar los servicios y las dotaciones de nuestro vecindario”, avanzaba en un comunicado. “Sin renunciar a mis principios, ni a mis ideales, ni mucho menos a las legítimas aspiraciones de todo un pueblo, con su historia y sus tradiciones”.

Otros enfrentamientos

Los reproches y rifirrafes entre el PSOE y Compromís han sido una constante desde que accedieran al poder en 2015. Ya tuvieron sus diferencias al principio con la portavoz de Ilicitanos por Elche, Cristina Martínez, con quien formaron gobierno hasta su salida, también forzosa, del tripartito. Más tarde, han mantenido criterios opuestos en temas centrales como el proyecto del Mercado Central, con salidas de tono por ambas partes. Las divergencias también han llegado en cuestiones como la política cultural de la ciudad, la turística o la del portal de transparencia.