València inicia la pacificación de Pérez Galdós y Giorgeta: aceras el doble de amplias y carril bici
El Ayuntamiento de València inició este martes las actuaciones provisionales de recuperación de espacio público en las avenidas Giorgeta y Pérez Galdós, tras los trabajos previos acometidos a principios de mes.
El proyecto de la Concejalía de Desarrollo Urbano que dirige la vicealcaldesa, Sandra Gómez, tiene un plazo de ejecución de 4 meses y consiste en la ampliación de las aceras y su separación de los vehículos, así como la habilitación de carril bici.
La zona de actuación alcanza toda la avenida Pérez Galdós y la avenida Giorgeta, 2 kilómetros y 136 metros de longitud que mejorarán el urbanismo de varios barrios de la ciudad.
Las obras consisten en la ampliación del espacio peatonal entre el Paseo de la Petxina y la calle San Vicente Mártir, en la ejecución de un nuevo itinerario ciclista y de nuevos pasos de peatones. El objetivo principal pasa para garantizar la distancia interpersonal en la zona peatonal, así como en la separación entre los flujos peatonales y los ciclistas mediante un bordillo separador.
Las aceras de las avenidas Pérez Galdós y Giorgeta, que actualmente presentan una anchura variable de entre 2 y 2,5 metros según tramos, pasarán a tener una anchura constante de 4 metros, con lo que el 45% del espacio estará destinado a los peatones. También se generarán dos nuevas plazas peatonales en los encuentros con las calles Jesus y con Cerdà y Rico.
Así, cada peatón dispondrá de la acera actual y de un espacio adicional en calzada. Además, la delimitación de espacios se realizará mediante bordillos que separen las nuevas zonas peatonales del resto manteniendo el acceso a los garajes y ampliando las paradas para autobuses de la EMT.
La actuación se enmarca dentro de la política desarrollada desde la Concejalía de Desarrollo y Renovación Urbana para la recuperación del espacio público para la ciudadanía en toda la ciudad.
Además, la ampliación de aceras en esta avenida es una reclamación histórica de los vecinos y vecinas y permite la recuperación provisional del espacio mientras se desarrolla el proyecto definitivo de transformación de las avenidas. Además, permite reducir la contaminación y el ruido y mejorar el paisaje y la calidad de vida.
Las nuevas zonas peatonales quedarán coloreadas según los criterios definidos en la 'Guía de diseño para la transformación sostenible del espacio público de València', aprobada en 2020, con el que esta actuación se convierte en una de las primeras experiencias de aplicación de la guía.
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