Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

La Diputación de Valencia lanza una colección sobre el valenciano que abre la puerta a acoger tesis secesionistas

Ricardo Gabaldón, Abelard Saragossà, Natàlia Enguix, Vicent Mompó, Antoni López i Quiles y Paco Teruel.

Sergi Pitarch

València —
28 de julio de 2025 22:24 h

3

La Diputación de Valencia ha presentado este lunes la colección Biblioteca de Filología Valenciana de la Institució Alfons el Magnànim, editorial de la corporación provincial, “para acercar el valenciano a la ciudadanía y reflexionar sobre esta lengua”. La recopilación de estudios lingüísticos pretende de manera científica acercar los tres modelos lingüísticos que, para sus impulsores, conviven en la sociedad valenciana: “los documentos de la Acadèmia Valenciana de la Llengua, los libros de estilo de las universidades públicas y el modelo de la Real Acadèmia de Cultura Valenciana”.

En la presentación de la colección, su director, el cura Antoni López i Quiles ha hecho una verdadera declaración de intenciones: La unidad de la lengua catalana y valenciana “se sostiene por cuatro reglas ortográficas”. López i Quiles ha reflexionado sobre el fracaso de las políticas lingüísticas impulsadas por la Generalitat Valenciana en los últimos 30 años. “La colección intenta abordar la lengua desde dos puntos de vista: el interno, qué es la lengua y cómo es, y el punto de vista externo, de sus usuarios que hasta ahora no han sido tenidos muy en cuenta”, ha explicado en una crítica abierta a “los factótums” que han reglado la lengua en los últimos años. “En las universidades hay dogmatismo y, cuando la lengua se hace sin los hablantes no sale bien”.

El primer libro que publicará la colección es 'Sistema d’accentuació (valencià, castellà, italià, s. XIX–XX)' del académico de la Acadèmia Valenciana de la Llengua Abelard Saragossà. La obra es una crítica a las normas de acentuación de la AVL por considerarlas poco coherentes y elitistas. Saragossà será la cara visible de esta colección, puesto que el segundo libro en ser publicado también será suyo y versará sobre la acentuación del topónimo de la ciudad de València, que el autor defiende que sea con acento cerrado.

A preguntas de los periodistas sobre si la colección puede albergar tesis secesionistas, Saragossà ha defendido que la recopilación “se sustenta en las investigaciones, y las investigaciones no están ni dentro de la unidad ni fuera de la unidad de la lengua”. “Cada libro tendrá un objeto de estudio investigado científicamente. Si es adecuado hará falta aceptar los efectos y si no es adecuado, hará falta demostrarlo. La ciencia avanza de esa manera”, ha sostenido. “En la sociedad valenciana hay tres modelos lingüísticos. El que aparece en lo documentos de la Acadèmia, el modelo lingüístico de las universidades y el modelo lingüístico de la RACV. En una sociedad eso no es posible. No debería existir. Ante esa tesitura que hemos de hacer, ante cada norma que haya hacer una investigación y ver donde está la razón. Los valencianos no podemos seguir en esa situación, y la colección de Folología Valenciana tiene la intención de ir reduciendo esas divergencias”, ha manifestado dejando caer que la colección pretende ser una especie de árbitro científico entre los tres modelos.

El presidente de la Diputación de València, Vicent Mompó, ha afirmado que la colección “abre un espacio para reflexionar sobre nuestra principal seña de identidad, el valenciano”. La colección “no nace desde la nostalgia ni desde la voluntad de imponer verdades absolutas, nace desde tres valores profundamente democráticos: la responsabilidad, la inteligencia colectiva y la voluntad de reconciliación, e invita a pensar, escuchar, comprender y dialogar, con rigor, libertad y humildad”, ha afirmado.

Mompó ha expuesto la voluntad de apostar por “las formas más nuestras: queremos un valenciano más vivo, queremos apostar por el camino del medio; queremos escuchar vacacions y no vacances, arreplegar y no recollir, gasto en lugar de despesa o eixir y no sortir, porque esas palabras están dentro de nuestra historia, de nuestra tierra, de nuestra manera de ser”. Todas estas excepciones planteadas por Mompó ya fueron aceptadas hace años por la Acadèmia Valenciana de la Llengua, que da por bueno los términos vacacions, arreplegar o gasto en su Diccionari Normatiu.

Este “camino del medio”, ha asegurado, no excluye ni a los normativistas ni a los populares, “el que entiende que el valenciano no puede ser patrimonio de una élite ni bandera ideológica, porque el valenciano no es de ningún partido político, es patrimonio común, identidad compartida, la lengua del pueblo”.

Ha considerado que en los últimos años las políticas lingüísticas han sido “un fracaso” pues el uso cotidiano del valenciano no ha aumentado. “Las leyes no han conectado con la realidad de los pueblos y de las ciudades. Se ha legislado mucho, pero se ha escuchado poco, y esto ha generado desconexión, desafección e incluso rechazo”, ha opinado.

Ha defendido que el valenciano “no crecerá desde la trinchera, no se transmite desde el miedo ni desde la superioridad moral, una lengua vive y vivirá gracias a quienes la estimamos, gracias al respeto profundo hacia quienes la hablamos”, y ha añadido que la Diputación de Valencia quiere “volver a hacer del valenciano un espacio de todas y todos”.

Con esta colección, la Institució Alfons el Magnànim vuelve a ser una editorial pública “al servicio del pensamiento libre, del análisis profundo, de las preguntas que incomodan y, por lo tanto, nos hacen avanzar”, ha manifestado.

Etiquetas
stats